miércoles, 17 de septiembre de 2014

NUEVAS EXPERIENCIAS

La vida te va llevando hacia lugares insospechados, hacia sitios donde ya cuando los visitabas, entrabas en una especie de trance embelesado, sobre todo por la belleza sublime de la Naturaleza en estado puro.
En el Cañón del Río Lobos todo es sutil, todo es armonioso sin ostentar, aun los ruidos de los "turistas" parecen sacados de un mercado medieval, e integrarlo en cada paso al caminar parece lo más lógico. Todo lo que te envuelve te invita a reflexionar, y sobre todo, a soñar que el mundo tal y como lo soñaron los señores del Cañón, aún es posible.
Como muestra de lo que digo sea el concierto de cuencos tibetanos en la cueva de la Galiana baja, donde al sonar el primer armónico ya teníamos a nuestros guías y a los habitantes de aquel lugar trabajando para nosotros, haciendo que cada uno recibiera el mensaje vibracional necesario para el momento presente.
Sentir que a través de una herramienta tan eficaz como es el cuenco o el canto llegue a traspasar paredes, silencios y espacios, es para creer cada día más en el poder mágico de estos humildes instrumentos.

Pero hubo más, mucho más. Un aprendizaje detrás de otro aprendizaje, una paz en el corazón y una acertada coordinación con personas con las que convivir es fácil, incluso adaptativamente 
coherente, para hacer un balance del fin de semana, altamente positivo y con perspectivas de poder sacar mucho más jugo a la experiencia según vayan pasando los días.
La vida es tan bella...y te hace acercarte a encuentros individuales con solo desear hacerlo.
Gracias